ACCESO LATERAL A LA VIA DE ENTRADA |
LA BAJADA "TE CHUPA" |
ENTRANDO |
YA EN MEDIO DEL TÚNEL. SE ADVIERTE POR LA FORMA DE LAS PAREDES QUE ES UN TUBO. ASIMISMO SE PUEDEN VER LOS SISTEMAS DE SEÑALES Y LOS BOXES CON MATAFUEGOS Y TELÉFONOS PARA EVENTUALES EMERGENCIAS. |
La gente de Médanos Cicloturismo viene
organizando unas salidas muy copadas y ha logrado que les autoricen el cruce en
bici del túnel subfluvial Uranga - Begnis, obra inaugurada en 1969. Yo
siempre la vi como una obra increíble. Los que nos fascinamos -desde el
amateurismo- con las grandes obras de infraestructura esta tiene todo lo que
uno desea: es un túnel que permite atravesar uno de los ríos más caudalosos del
mundo, un verdadero tubo de hormigón que se apoya sobre el lecho del río.
Además es una obra activa que requiere de permanente supervisión y cuidados.
Siempre soñé con pasar por el túnel y esta vez me iba a tocar hacerlo de la
mejor forma: pedaleando.
Hay mucha información sobre cómo se desarrolló
el proyecto (ver páginas: www.tunelsubfluvial.gov.ar
y el muy buen relato en www.paraconocernos.com.ar/?=578)
pero lo que cuenta es la importancia de unir al litoral y en particular a dos
ciudades tan importantes: la anfitriona Paraná y la de Santa Fe.
A media mañana, en un parador de las playas
Del Thompson se arrancó con la acreditación de los participantes. Todo muy
organizado, un relojito que funcionó con el mejor motor: la buena onda de Aldo
y sus colaboradores.
Entre las más de 500 personas que fueron con
su bici encontré muchos amigos, remeras que marcaban pertenencia a muchos
pueblos y ciudades de otras provincias.
A las 13,00 hs largamos con puntualidad ya que
el paso por el túnel estaría habilitado para los ciclistas en una franja
determinada de tiempo para ir y volver. En efecto, cerraron una de las más
importantes vías interjurisdiccionales para que quinientos monos se dieran el
gusto de deslizarse por el suave asfalto del paso subacuático.
La entrada al túnel es impresionante, en
bajada te vas metiendo al tubo y por efecto del aire y la pendiente, sin
pedalear alcanzas los 50
km/h (a la vuelta limitaron la velocidad para evitar
caidas), la gente gritando, riendo, el rebote de los gritos en las paredes
azulejadas, muy copado. Los tres kilómetros del túnel se pasan volando, cómo
una montaña rusa.
SENDERO EN SANTA FE |
LLEGADA CON AMIGOS |
Salimos del túnel y tomamos la autovía que te
lleva a Santa Fe, reagrupando llegamos a un campo de deportes, luego un poco de
sendero y terminamos haciendo una parada en el Club Caza y Pesca de Santa Fe, a
orillas del río Colastine. Nos dieron fruta y turrón, merendamos en el quincho
y a pleno sol nuevamente a atrayente sombra del túnel. Nuevamente la emoción de
pasar a buen ritmo. A la salida del túnel autos esperando que lo vuelvan a
habilitar. No vimos mala onda de los automovilistas pero si me jodió ver
algunos ciclistas hacer alguna burla a los ocupantes de los autos que se
tuvieron que optaron por bajarse de los vehículos ante la imprevista espera a
metros de las cabinas de peaje (en realidad en la página de Internet de la
autoridad que mantiene el paso estaba anunciado el corte, pero quién carajo va
a ver las páginas de Internet antes de pasar por un puente, ruta o, en este
caso, un túnel subfluvial).
De nuevo en Paraná, ordenado el pelotón
cruzamos un arco de llegada y nos entregaban una medalla. Muy piola la
propuesta de los organizadores y eternamente agradecido por permitirme pasar
tan buenos momentos con amigos en lugares tan copados.
Jorge
IMPRESIONANTE LUNA LLENA |