Llegando a la Catedral
Típica Casita de la Isla Santiago
Muelle - Isla Santiago. Una clase de perspectiva.
Estación Punta Lara.
Típica Casita de la Isla Santiago
Muelle - Isla Santiago. Una clase de perspectiva.
Estación Punta Lara.
Puente giratorio en la zona portuaria de Ensenada
Habituado a las salidas rurales en las que uno palpita, kilometro a kilometro, que por esos lares algo pasó –pero de forma casi imperceptible- y en las que a veces se recorren grandes distancias para dar con un puente, una pulpería o una referencia histórica, cuando se propone una salida urbana como la que hicimos con los Megabikers y más aún en una zona como la del Gran La Plata, en la que transcurrió una historia tan vibrante, la cosa cambia y el relato de la recorrida puede extenderse por páginas y páginas dando cuenta de cada una de las referencias con la que nos topamos el sábado 25 de septiembre pasado.
Es impresionante lo que ofrecen las localidades de Punta Lara, Ensenada, Berisso y La Plata para el ciclista que tenga ganas de internarse en sus rincones y descubrir gran parte de la historia política, industrial, comercial, social y hasta recreativa de nuestro país a través de sus huellas: pintorescos barrios, obras maestras de la arquitectura, edificios públicos fastuosos, parques y obras públicas monumentales, y también, cómo no, bolsones de miseria, degradación ambiental, abandonos y proyectos truncos.
Lo lindo es descubrir todo ese cóctel acompañado de un grupo de amigos tan copados como Ale Pol y los Mega, con un clima perfecto para andar en bici y un sol radiante que me provocó la primera quemadura de la temporada primavera verano 2010 / 2011.
A media mañana partimos por el último tramo de la Ruta 11 hacia Punta Lara, visitamos la vieja estación que esta muy bien conservada y destinada a centro comunitario y biblioteca popular. Se nota que la zona gozó de épocas de esplendor, pero habría que volver a visitarla en verano para ver como luce con la gente.
Siguiendo el camino costero y tras cruzar un puente levadizo que sortea la boca del Rio Santiago, llegamos a la Isla Santiago, un lugar increíble. Frente a la Isla Paulino se asienta un pintoresco caserío, con sus callecitas de conchilla en la que no pueden entrar los autos y que le dan aire bohemio que se respira paso a paso.
Luego llegamos a Ensenada, ciudad que junto a Berisso tienen una historia impresionante. Ambas ciudades son historia paso a paso. Edificios centenarios y rincones espectaculares, señales de movimientos portuarios del presente y de pasado muy intenso.
En Ensenada visitamos el Fuerte de la Ensenada de Barragán, con su museo y espacio destinado a la gesta de Malvinas, y ya en el puerto de La Plata fuimos a ver el puente ferroviario giratorio que permitía a los ferrocarriles que se acercaban el puerto cruzar el canal lateral del Oeste. Una obra impresionante para facilitar el avance del tren por apenas 500 metros. Otras épocas.
Entrando en Berisso visitamos la calle Nueva York y nos zambullimos en la Fiesta de los Inmigrantes que se celebra todos los meses de septiembre. Muchos stands con comidas típicas, todas colectividades europeas –salvo la de Cabo Verde- preparadas de modo auténtico y a precios razonables.
Yo compré en el stand polaco, el griego, y el de Lituania. En éste último probé –en el marco de un sánguche de carne de cerdo- nabo rayado picante. Muy loco ese aderezo. Pica infernalmente pero no en la boca, sino en el cerebro. A los tres o cuatro segundos de que se lo traga se siente una especie de golpe en el medio del cerebro que te obliga a cerrar los ojos y sentirte como en un planetario. Toda una experiencia química pero natural.
Chau a la Fiesta y derecho a La Plata. Pasamos por el Bosque y llegamos a la casa de Gobierno y la Residencia del Gobernador, edificio espectacular al que pudimos ingresar gracias a que rige un programa de puertas abiertas con motivo del Bicentenario de la Patria.
Lamentablemente la tarde se estaba cerrando y no pudimos visitar ni siquiera la décima parte de lo que ofrece La Plata. Tomamos una foto grupal en la Plaza, frente a la Catedral y pasamos por la Casa Curutchet, única casa vivienda diseñada por el arquitecto Le Corbusier en América y protagonista de la película “El Hombre de al lado”.
Una espectacular salida de la mano de Ale Pol y que reafirma que La Plata y alrededores es una zona que merece ser pedaleada muchas veces más.
Jorge
Es impresionante lo que ofrecen las localidades de Punta Lara, Ensenada, Berisso y La Plata para el ciclista que tenga ganas de internarse en sus rincones y descubrir gran parte de la historia política, industrial, comercial, social y hasta recreativa de nuestro país a través de sus huellas: pintorescos barrios, obras maestras de la arquitectura, edificios públicos fastuosos, parques y obras públicas monumentales, y también, cómo no, bolsones de miseria, degradación ambiental, abandonos y proyectos truncos.
Lo lindo es descubrir todo ese cóctel acompañado de un grupo de amigos tan copados como Ale Pol y los Mega, con un clima perfecto para andar en bici y un sol radiante que me provocó la primera quemadura de la temporada primavera verano 2010 / 2011.
A media mañana partimos por el último tramo de la Ruta 11 hacia Punta Lara, visitamos la vieja estación que esta muy bien conservada y destinada a centro comunitario y biblioteca popular. Se nota que la zona gozó de épocas de esplendor, pero habría que volver a visitarla en verano para ver como luce con la gente.
Siguiendo el camino costero y tras cruzar un puente levadizo que sortea la boca del Rio Santiago, llegamos a la Isla Santiago, un lugar increíble. Frente a la Isla Paulino se asienta un pintoresco caserío, con sus callecitas de conchilla en la que no pueden entrar los autos y que le dan aire bohemio que se respira paso a paso.
Luego llegamos a Ensenada, ciudad que junto a Berisso tienen una historia impresionante. Ambas ciudades son historia paso a paso. Edificios centenarios y rincones espectaculares, señales de movimientos portuarios del presente y de pasado muy intenso.
En Ensenada visitamos el Fuerte de la Ensenada de Barragán, con su museo y espacio destinado a la gesta de Malvinas, y ya en el puerto de La Plata fuimos a ver el puente ferroviario giratorio que permitía a los ferrocarriles que se acercaban el puerto cruzar el canal lateral del Oeste. Una obra impresionante para facilitar el avance del tren por apenas 500 metros. Otras épocas.
Entrando en Berisso visitamos la calle Nueva York y nos zambullimos en la Fiesta de los Inmigrantes que se celebra todos los meses de septiembre. Muchos stands con comidas típicas, todas colectividades europeas –salvo la de Cabo Verde- preparadas de modo auténtico y a precios razonables.
Yo compré en el stand polaco, el griego, y el de Lituania. En éste último probé –en el marco de un sánguche de carne de cerdo- nabo rayado picante. Muy loco ese aderezo. Pica infernalmente pero no en la boca, sino en el cerebro. A los tres o cuatro segundos de que se lo traga se siente una especie de golpe en el medio del cerebro que te obliga a cerrar los ojos y sentirte como en un planetario. Toda una experiencia química pero natural.
Chau a la Fiesta y derecho a La Plata. Pasamos por el Bosque y llegamos a la casa de Gobierno y la Residencia del Gobernador, edificio espectacular al que pudimos ingresar gracias a que rige un programa de puertas abiertas con motivo del Bicentenario de la Patria.
Lamentablemente la tarde se estaba cerrando y no pudimos visitar ni siquiera la décima parte de lo que ofrece La Plata. Tomamos una foto grupal en la Plaza, frente a la Catedral y pasamos por la Casa Curutchet, única casa vivienda diseñada por el arquitecto Le Corbusier en América y protagonista de la película “El Hombre de al lado”.
Una espectacular salida de la mano de Ale Pol y que reafirma que La Plata y alrededores es una zona que merece ser pedaleada muchas veces más.
Jorge
un post que "enriquece" la salida de lujo que disfrutamos con Alepol.
ResponderEliminarabrazo
Me encantaron las fotos mas que nada la del muelle y tengo ganas de hacer alguna salida con Ale Pol pero siempre son los sabados y la verdad me queda bastante lejos...
ResponderEliminarFerrito, ojalá te puedas enganchar un día de estos. Muy bueno tu blog. Ya lo estoy siguiente.
ResponderEliminarJorge